La carrera continuada de Elecciones Generales con dos convocatorias el mismo año y otra limitada a las provincias de Galicia y País Vasco, ha terminado pasando factura al PSOE en forma global afectando al número de escaños obtenidos y, de manera mucho más concreta, a su hasta ahora Secretario General, Pedro Sánchez.
Tras la celebración de un Comité Federal en el que se quería abordar la delicada situación del segundo partido político más votado en España, se sometió a votación si debería celebrarse unas primarias y un Congreso Extraordinario.
Antes de la votación, Pedro Sánchez advirtió que en caso de perder en votos, presentaría su dimisión. El madrileño perdió y cumplió su palabra. En una votación realizada a mano alzada, 132 votos se situaron en contra y 107 votos a favor.
Tras la dimisión, el Comité Federal del PSOE ha dejado en manos de una gestora el futuro inmediato del partido, con el asturiano Javier Fernández al frente. Ahora los objetivos del Comité Federal son bastante ambiciosos y a sus responsables les queda mucho trabajo por delante.
El paso más importante deberá ser su posición con respecto a la investidura del líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, tras un inmovilismo en la negativa de Pedro Sánchez durante todo este periodo. La posibilidad de una abstención es la que cobra más fuerza, pese a que se desconocen las posibles condiciones actuales que el PSOE podría pedir en esta nueva argumentación.
Del mismo modo, el partido debe plantear su futuro inmediato a nivel interno, tanto en lo referente a posturas gubernamentales como también en cuanto a dirigentes que se encargarán de conducir el PSOE.
De momento, el resto de partidos políticos ha aprovechado la situación para incrementar sus críticas y presionar al PSOE. El PP ha desacreditado la «abstención técnica» y exige un mayor compromiso con respecto a las medidas que deben aprobarse. Por su parte, Podemos ha criticado la inestabilidad del PSOE y se ha planteado el temido sorpasso que les daría la segunda posición en número de escaños, en caso de producirse nuevas Elecciones Generales. Por último, Ciudadanos ha planteado la posibilidad de flexibilizar sus condiciones en caso de que la postura del PSOE sea más abierta a una futura colaboración.