Recientemente se ha informado acerca de nuevas medidas para dispositivos policiales de las que informó hace apenas unos meses el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, en una comparecencia en el Congreso. Al parecer determinados fallos de coordinación en diferentes actuaciones policiales habrían motivado la necesidad de una reestructuración de las medidas a desarrollar, además de subrayar la necesidad de complementarlas con nuevos medios y materiales que la Policía utilizará en manifestaciones y otros eventos similares en los que deban intervenir. Además se relevó de su cargo al jefe de la primera Unidad de Intervención Policial de Madrid al ser la persona al mando y por tanto responsable de determinados fallos de coordinación que han motivado estos cambios.
El director general de la Policía señaló que su idea es dar otro aire a la estructura de las Unidades de Intervención Policial, que en la actualidad sirven para dar apoyo a cualquier tipo de actuaciones, de forma que se convertiría en una especia de equipo de élite que acudiría en ayuda de la Policía en casos de violencia extrema, graves desórdenes, etc. Unos equipos que estarían dotados de vehículos para su rápida movilidad y poder acudir prestos a la llamada de sus compañeros en caso de necesidad, manifestaciones o eventos en los que se requiera su actuación.
Pero además de anunciar esta remodelación de lo que actualmente son estas Unidades de Intervención Policial, el director general de la Policía anunció la incorporación de nuevo material antidisturbios más reforzado que el que existía actualmente, gracias a nuevas partidas presupuestarias. Entre estos materiales se encuentran botas tácticas y cascos, guantes y por supuesto mejores vehículos para facilitar la movilidad de la UIP. Unos materiales que muchos policías adquieren por su cuenta pero que ahora se les facilitarán con cargo a partidas en los presupuestos generales del Estado como algo necesario según subraya Ignacio Cosidó. El material que se ha adquirido incluye cerca de 3.000 uniformes nuevos impermeables, resistentes a cortes, ignífugos y que repelen el ácido, además de guantes anti cortes, y 800 cascos con revestimiento y pantallas especiales para evitar que se dañe a los agentes en caso de lanzamiento de piedras u otros objetos. Además de los 40 nuevos vehículos que se han adquirido también se han incluido chalecos anti trauma, escudos transparentes con plancha de policarbonato de mayor espesor para proteger a los agentes y protectores de pierna que ahora serán obligatorios para todos los grupos.