A pocos se les escapa lo que es una realidad: los móviles han dejado de ser un mero dispositivo de comunicación oral para convertirse en plataformas de comunicación y ventas. Constatarlo con datos ayuda a hacernos una idea real de la importancia y oportunidades que ofrecen los móviles para los negocios. Y para eso nos fijamos en el estudio sobre consumo móvil en España referido a 2014 que ha elaborado la auditora Deloitte.
Sorprenden algunas de las conclusiones a los que llegan los analistas de Deloitte. Según sus estimaciones una gran parte de los más de veinte millones de usuarios de tecnología móvil conectada a Internet consulta su dispositivo más de 50 veces al día (habría que contrastar con un estudio psicológico para ver si la actualización tan minuciosa es búsqueda información o de apego). Sea como sea, al menos la cuarta parte de los usuarios consultan el teléfono como última acción antes de acostarse, acto que repiten al levantarse.
La tecnología 4G y los smartphones han hecho decaer el consumo de SMS, sustituyendo sus funcionalidades por la mensajería instantánea. De hecho las aplicaciones móviles sigue siendo un mercado en auge, aunque con menos crecimiento. Si en 2013 la mitad de los usuarios se había descargado al menos una aplicación en el último mes, en 2014 ese porcentaje no llega a 40 puntos. El estudio también pone de manifiesto una saturación de aplicaciones, optando los usuarios por aplicaciones móviles que le son realmente útiles. De estas, las dedicadas a los servicios financieros son las más habituales, si bien la realización de transacciones a través de dispositivos móviles sigue estancada en números bajos.
En la realización del estudio han participado 2000 personas de entre 18 y 75 años, que se suman a las 30000 personas de 22 países que completan el informe a nivel mundial.